NINTENDO LABO: el juguete con el que aprendes programación

Con su lanzamiento previsto para el próximo 27 de abril, Nintendo LABO consiste en la utilización de dispositivos de cartón que tú mismo fabricas para buscar una alternativa de ocio y entretenimiento diferente a la que ya nos tiene acostumbrados su última consola, Nintendo Switch.

Esta nueva acción de Nintendo se divide en tres pilares fundamentales: Crea, juega, descubre. Pese a que a bote pronto destaque su utilidad como elemento de ocio –crea y juega–, LABO guarda una aplicación muy útil: descubrir el mundo de la programación de una forma muy básica y divertida.

El apartado de Descubrir está enfocado a responder cómo funciona Nintendo Labo. Para entender completamente esta ingeniería de cartones necesitamos un buen diseño industrial para las figuras de cartón, la cámara incorporada del mando derecho de la consola y las pegatinas reflectantes que hacen que, al reflejarse en la cámara, el software de la consola lo interprete como una cosa o como otra.

Dentro del kit variado (o toy-con 01) aparecen una serie de plantillas de cartón con las cuales tú, con ayuda de tu Nintendo Switch, deberás construir paso a paso el dispositivo de cartón con el cual podrás incorporar la consola y jugar a una serie de minijuegos. Por ejemplo, nosotros mismos construimos un robot con el cual se movía a control remoto debido a la vibración de los mandos de la consola.

Inventa nuevas maneras de jugar con el taller Toy-Con. Este laboratorio secreto que encontrarás en tu consola, te permitirá crear tus propios Toy-Con mediante una programación muy fácil e intuitiva. Esto nos dará infinitas posibilidades, por ejemplo podemos hacer que tocando la pantalla vibre solamente el mando derecho o que al pulsar un botón suene una nota musical.

“Nintendo Labo no es para gamers, es un juguete diseñado para niños y sus familias”, explicó un responsable de la multinacional a Cibersur en un evento de presentación del dispositivo.

En definitiva, Nintendo Labo nos da la posibilidad de enseñar a los niños de pequeños el arte de la programación de una forma muy sencilla y didáctica. ¿Quién dijo que no se podía aprender jugando con una videoconsola?